En BEKA S.A. seguimos construyendo soluciones, sin dejar de lado nuestro compromiso con la reducción de la huella de carbono. Incorporando a nuestro portafolio de productos una amplia LÍNEA DE EQUIPOS CERO EMISIONES.
Las nuevas Torres Solares de Iluminación BE ENERGY destacan por su autonomía de 32 hs, incorporando 4 paneles solares de 450 W y 4 focos de 100 W, que entregan un total de 72.000 lm (lúmenes) . Ideal para aplicaciones mineras pero también para la construcción, ya que no existe motor incorporado en el equipo, eliminando los sonidos asociados a esto.
«Para BEKA S.A es sumamente importante contribuir en este desafío que tenemos a nivel mundial, que es reducir la huella de carbono. Es por ello que estamos constantemente buscando nuevas tecnologías que nos permitan entregar a nuestros clientes alternativas para construir soluciones en este sentido», nos cuenta Andrés Murúa, Gerente General de BEKA S.A.
Matías Vega, Socio Fundador y Gerente Comercial de Be Energy, agrega «esta torre viene con cuatro paneles de 450 watts y entrega una autonomía de 32 horas. La torre la instalamos en Faena, no hay que cargarle combustible, no se necesita un operario de capacidad técnica muy elevada porque la mantención de la torre en sí es sólo limpiar sus paneles y la torre que va funcionando».
«con respecto a la iluminación de este equipo, incorpora cuatro focos de 100 watts que entregan un total de 72.000 lúmenes. Con dos alternativas, luz blanca y luz cálida. De la luz cálida se ocupa bastante en el norte por un decreto de contaminación lumínica existente. Incluye un banco de baterías de 1600 amperes, quiere decir de que en el día alcanzamos con los paneles que tenemos a cargar el banco completo y me entrega de 9 a un 100% de carga. Cuenta además con un kit minero, con cubre winche, con cuña, extintor y el tablero y todo funciona a 24 o 48 watts. Todo lo mencionado es una ventaja aún mayor por sobre la diésel, en el sentido de que un equipo que es de seguridad total, por ejemplo en caso de que un cable se corte, tenemos un voltaje muy bajo.».
«En construcción ayuda bastante en la ciudad, porque además de ser ecológica, en términos de disminución de carbono, tampoco emite ruido. A diferencia de un motor tiene cero decibeles versus los decibeles muy alto de una torre diesel. Por lo tanto, en la ciudad cuando hay construcciones de noche, es muy amigable con el vecindario porque no genera ningún ruido y se evita cualquier reclamo o molestia de la comunidad. Además, los mismos operarios que están trabajando no tienen el ruido constante en su oído para poder trabajar y operar de manera correcta», finaliza Matías Vega.
